10 diferencias entre alergia al polen y resfriado en los niños

La llegada de la primavera y el verano implica cambios en el discurrir de la vida familiar a muchos niveles. Nuestros niños siguen ansiosos de salir a la calle, con la diferencia de que ahora ambos disfrutamos del bueno tiempo. Para nosotras, no se hace tan cuesta arriba prepararlos para dar un paseo o ir al parque, pues paso a paso renovamos el armario y ya no es necesario equiparles de miles de capas de ropa que les proteja del frío y porque… ¿a qué mamá no le encanta que sus pequeños estrenen ropita?

Pero, ¡ay! No todo es del color de rosa en primavera/verano. Hoy, en el blog de Vagaluz nos adentramos en el mundo de la alergia primaveral. Y es que, por estas fechas en mayo, que no dejamos de vivir cambios de temperatura, los niños corren el riesgo de sufrir los típicos catarros, pero… ¿cómo distinguir un resfriado de la primaveral alergia al polen?

Diferencias de base entre alergia al polen y el resfriado

Los procesos que desencadenan los síntomas de la alergia y del resfriado en nuestros niños son diferentes. Según la OMS, “las alergias son respuestas exageradas del sistema inmunológico, es decir, de las defensas del organismo, al entrar en contacto con ciertas sustancias (alérgenos),” que para otras personas son inofensivas. El caso que más nos compete por su carácter estacional es el de la rinitis alérgica (alergia al polen).

Nuestros pequeños sufrirán una reacción alérgica de manera repentina justo cuando estén en contacto con el polen. Por ello, su aparición se multiplica en primavera: muchas plantas polinizan a través del aire, por lo que las partículas se extienden de manera notable.

Sin embargo, la aparición del catarro es más gradual y se desarrolla con posterioridad a un periodo de 5 a 7 días. El resfriado es un proceso infeccioso respiratorio causado casi siempre por un virus. Los síntomas afectan a la nariz, garganta y bronquios.

Siguiendo el refrán español “más vale prevenir que curar”, muchos padres deciden que los niños pasen las pruebas de la alergia para determinar posibles intolerancias antes de que muestres los síntomas. Para detectar la rinitis alérgica, es necesario realizarlas fuera de temporada. Según la doctora Esther Martín, “las pruebas cutáneas se pueden hacer a lactantes de pocos meses, pero son más fiables a partir de los 2 años de edad”.

10 preguntas y respuestas para distinguir alergia de resfriado en tus 'peques'

A pesar de que el cuadro de síntomas puede ser similares, los pequeños matices que identificamos con estas preguntas y respuestas marcan la diferencia entre alergia y resfriado:

Si después de este análisis básico sospechamos que el niño puede tener alergia, deberás que acudir al médico y que este determine el tratamiento adecuado (¡en ningún caso debemos dar antibióticos a los peques!).

Por último, revisar los niveles de polen puede ayudar en esta tesitura, por lo que la SEAIC (Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica) pone a nuestra disposición la web www.polenes.com donde podemos consultarlos.