Producto correctamente añadido a tu carro de compra
Hay 0 artículos en tu carro Hay un artículo en tu carro
Lookbooks
Pubicado el : 29/02/2016 14:07:16
Categorias : Salud
La práctica del colecho despierta pasiones entre defensores y detractores. En Vagaluz hemos querido adentrarnos en el mundo de esta práctica. El colecho en el marco de la maternidad supone que el bebé y la madre (con o sin el padre) duermen juntos. Pueden dormir simplemente en la cama, o en una cuna de colecho, especialmente habilitada para que un lateral quede abierto y pegado a la cama de matrimonio.
La relación del colecho con los casos de muerte súbita en bebés ha despertado críticas a esta práctica. El riesgo de síndrome de muerte súbita del lactante está focalizado en bebés de dos y cuatro meses. Este síndrome conlleva la muerte súbita del bebé menor de un año y tiene lugar durante el sueño, no arroja síntomas que podamos prever y evitar así el desenlace fatal. Por ello es causa de tanto miedo.
El colecho se puede practicar de manera segura, y, siendo así produce más beneficios que perjuicios. Estas son algunas de las recomendaciones de la Asociación Española de Pediatría para practicar un colecho seguro:
La práctica del colecho refuerza los lazos entre madre e hijo, facilitando la adaptación del bebé a la lactancia materna, especialmente durante los primeros 6 meses. Sin embargo, el colecho, aunque seguro, debe ser limitado en el tiempo pues puede ser generador de relaciones de dependencia entre padres y madres. Según la Academia Americana de Medicina del Sueño, compartir cama con los hijos lleva a que estos dependan más de los arrumacos y mimos de los padres para conciliar el sueño.
Siganos