Cómo conseguir que tus hijos hagan sus deberes

Después de las navidades, a muchos niños les cuesta volver a la rutina y retomar sus obligaciones diarias. Los deberes se convierten en una pesadilla para ellos y para los padres, que no saben cómo lograr que se sienten a hacer sus tareas sin discusiones de por medio.

Sin embargo, una actitud positiva es fundamental para inculcar en los pequeños el concepto de la responsabilidad y del esfuerzo, tan importantes en la vida de cualquier persona.

Por eso, en Vagaluz, vamos a darte algunos trucos para que consigas que tus hijos hagan sus deberes sin problemas y aprendan a cumplir con sus obligaciones de cara al futuro.

5 consejos para lograr que tus hijos hagan sus deberes solos

1. Busca un espacio adecuado. Reserva, para él, un espacio de la casa en el que pueda sentarse tranquilamente a hacer sus deberes. Es importante que esté lejos de distracciones como la televisión, el ordenador o sus juguetes, para evitar las distracciones en la medida de lo posible, al menos, en los primeros años. Lo ideal es que disponga de una mesa amplia en la que pueda tener a mano todo el material que vaya a necesitar (lapiceros, bolígrafos, pinturas, rotuladores, tijeras, pegamento…) y que la silla se pueda adaptar a su altura y a su crecimiento.
2. Entérate de lo que tiene que hacer. Acostúmbrate a preguntarle, cada día, qué es lo que tiene que hacer, y revisa al final de la tarde que todo esté terminado. De esta forma se irá acostumbrando a cumplir diariamente con sus obligaciones y llegará un momento en el que lo hará por sí solo, sin necesidad de que tú se lo recuerdes.
3. Fija una rutina. Habitúale a hacer los deberes, cada día, a la misma hora. De esta forma irá adquiriendo una rutina de trabajo que hará más sencillo su trabajo diario.
4. Ayúdale en lo que necesite. Es importante que, los primeros meses, seas capaz de sentarse a su lado mientras hace su tarea y hables con él de las actividades que tiene que hacer. De este modo, podrás explicarle las dudas que le surjan, echarle una mano en aquello que necesite y elogiarle cuando lo haga bien por sí solo. Y es que es muy importante animarle y trabajar con refuerzos positivos desde el principio.
5. Dale un incentivo. Como decimos, los refuerzos positivos son fundamentales en el aprendizaje. Ofrécele una recompensa cuando termine correctamente sus deberes y conseguirás que se habitúe a ellos más fácilmente y con mejor actitud. Hablamos de un incentivo sencillo, como jugar con sus juguetes favoritos, ver a sus amigos, hacer alguna actividad contigo o con otro miembro de la familia, etc.