Producto correctamente añadido a tu carro de compra
Hay 0 artículos en tu carro Hay un artículo en tu carro
Lookbooks
Pubicado el : 04/02/2016 08:29:46
Categorias : Estilo de Vida
La creatividad es algo inherente a los niños, que no dejan de sorprendernos con curiosas ocurrencias en el día a día. Por desgracia, esta capacidad para imaginar mundos paralelos, utilidades por descubrir de objetos cotidianos y preguntas chocantes por su originalidad va disolviéndose según caminan los años y los niños crecen. Como padres, debemos ralentizar este proceso para que los niños alcancen edades más avanzadas manteniendo mayores dosis de creatividad, porque esta les ayudará sin duda a resolver situaciones cotidianas a lo largo de toda su vida.
Por ello, desde Vagaluz hemos recopilado una serie de recomendaciones que te ayudarán a evitar la pérdida de creatividad en los niños:
El ámbito de las manualidades es perfecto para que los niños desarrollen su creatividad y mejoren el manejo de utensilios. Además de potenciar su capacidad de creación, las manualidades son fuente de diversión para los niños, que se entretienen cavilando posibilidades y ejecutándolas en distintos formatos y colores: plastilinas, ceras, papeles, pinturas de colores, cartulina... Lo ideal es no dirigir los pasos del niño, sino dejarle dibujar o modelar a su antojo.
Los niños son los reyes de la improvisación y de las ocurrencias. En muchas ocasiones, entornos excesivamente estructurados, como puede ser en algunos casos la escuela, limitan el derroche creativo de los niños, siempre vinculado a la libertad. Por ello, una amplia libertad de expresión es positiva para que los niños generen sus propias ideas y no tengan miedo excesivo a equivocarse.
¡Ojo! Eso sí, hablamos de libertad, pero no de ausencia de reglas de conducta. La libertad puede conseguirse a través de situaciones cotidianas. Un caso podría bien ser cuando reciba un regalo nuevo; en este contexto es mejor dejarle experimentar con su uso antes de mostrarle cómo debe usar el juguete. También les podemos hacer partícipes de la elección de su ropa, para que desarrollen la toma de decisiones independientes.
Sabemos que puede ser tentador… pero, en cuestión de creatividad, vale más que los niños se aburran y lancen su imaginación al vacío antes que se queden pegados frente a las brillantes pantallas de televisión o tabletas. La exposición excesiva a la televisión limita ciertamente la imaginación de los niños, al mostrarles estereotipos modelados por la publicidad.
Si los niños están a nuestro alrededor, antes de mandarles a ver la televisión, podemos jugar con las palabras y, por ejemplo, proponer letras de inicio y de final para que ellos piensen términos que encajen. También les podemos preguntar por usos adicionales para objetos comunes (“¿para qué más podemos utilizar un paragüas?”).
Una capacidad creativa fuerte aumenta la confianza de los niños en ellos mismos, lo que les permite expresar sus ideas y sentimientos con libertad. Debemos ayudar a nuestros hijos a improvisar y encontrar soluciones inesperadas para las situaciones de siempre.
Siganos