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Lookbooks
Pubicado el : 03/08/2016 09:38:19
Categorias : Estilo de Vida
Estamos en plena época veraniega de vacaciones y eventos diversos entre los que encontramos las ceremonias reinas del buen tiempo: las bodas. Son ocasiones especiales para nuestros niños también, que salen de la rutina con dos clases de resultado: sorpresa e interés o aburrimiento máximo.
Normalmente, el aburrimiento se ataja animando a los pequeños a participar. El trabajo de planificación de una boda también tiene en cuenta el papel que pueden jugar dentro de la ceremonia. ¿Qué roles se les ha otorgado tradicionalmente a los niños?
En primer lugar, el rol de los niños en la boda dependerá del parentesco que tengan con los novios. ¿Son sobrinos? ¿Son hijos de amigos? La relación familiar será la base para determinar cómo van a participar. Por supuesto, si se quiere incluir a los niños dentro de la planificación de la boda, se deberá informar a los padres y pedirles ayuda para que los peques cumplan su papel de buen grado.
Por otro lado, la edad del niño es importante para asignarle una tarea u otra. No solo eso, sino que también el carácter de cada niño será clave: por ejemplo, si es un niño tímido no le obligaremos a leer delante de todos los invitados, sino que a lo mejor puede desempeñar otro papel que esté menos expuesto.
Finalmente, si en la organización general de la boda participan los niños, el fotógrafo debe estar informado en todo momento para que esté pendiente e imprima todos esos momentos con su cámara.
El papel de los niños suele acompañar a los novios en la ceremonia antes, durante y después. En este caso, los niños serían los encargados de anunciar la tan esperada llegada de la novia por medio de un cartelito y presidir, en este caso, la comitiva hasta el altar en la iglesia, o ante el oficiante en una boda civil.
Otro rol que podrían desempeñar los más pequeños es marcar el camino de la novia esparciendo pétalos de flores que llevarán cómodamente en una cestita. También pueden participar en arrojar pétalos y arroz al final de la ceremonia.
Los vestidos de novia suelen ser aparatosos y presumir de una larga cola. A las niñas les puede encantar este rol, ya que pueden ir detrás de la novia y ser las encargadas de colocar la cola del vestido y que esta luzca en todo su esplendor.
Un papel tradicional de los niños es llevar las arras y las alianzas. Las arras son trece monedas del mismo tamaño que se entregan en la boda después del intercambio de anillos. Simbolizan la unión de la pareja y la aceptación de las responsabilidades en el matrimonio por parte de los novios. ¿Por qué trece? Doce de ellas representan los meses del año y la última está dedicada al compromiso de compartir con los más desfavorecidos.
Para comodidad de los niños, lo ideal es que puedan transportar las arras y las alianzas en una pequeña cestita. Normalmente se entregan a la vez y los novios las intercambian al mismo tiempo. Por último, para que los niños sean conscientes de su papel, es interesante ensayar con ellos antes de la ceremonia y que así tengan claro el momento de entrada.
Para ello, las niñas suelen llevar vestidos en color nácar que acompañan al estilo de la novia. Este vestido de Badum Badero (¡de oferta!) puede ser un ejemplo del estilo predominante en estas ocasiones:
Los niños también pueden dedicar unas palabras a los novios. Hay que considerar que por lo menos tengan 8 o 9 años para que tengan suficiente soltura y aplomo para leer delante de los invitados. El niño puede llevar el texto escrito como guía (no más de 2 párrafos).
También en el banquete podemos involucrar a los peques pidiéndoles ayuda para repartir los regalos de los invitados. Es otra manera de que se sientan protagonistas y disfruten de su momento de fama, ideal para los más tímidos o vergonzosos.
Antes de la boda podemos animar a nuestros pequeños a que tengan un papel más activo y no les resulte aburrido. Por ejemplo, pueden dar su opinión a la hora de elegir el vestido o el conjunto de ceremonia que llevarán.
Sobre todo para los niños más tímidos que no quieren ser protagonistas en la ceremonia en sí, pueden entregar una manualidad a los novios que habrán elaborado en casa previamente. Seguro que les hace mucha ilusión poder dárselo ellos mismos en el banquete.
Y vosotras, ¿tenéis en mente algún otro papel que juegan los niños en las bodas? ¡Compartidlo sin dudarlo!
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